¿Qué nos ha gustado?
- Bien hilado: Tammara Webber construye en El amor es todo menos sencillo una trama romántica que, a pesar de no ser el paradigma de la originalidad, convence por lo bien construida que está y el buen uso que hace la autora del misterio que envuelve a los personajes y el romance que se fragua entre ellos.
- Un elenco recomendable: los protagonistas de El amor es todo menos sencillo son cercanos y muy humanos. Se sienten como figuras próximas al lector que se comportan con realismo, sin perderse en pastiches románticos ni en idealismos innecesarios.
- Naturalidad: lo mejor que tiene la prosa de Webber es la sencillez y la naturalidad que prima en ella. Los diálogos son ágiles y realistas y no se sienten como algo impostado. Las descripciones no se pierden en un exceso de detalle y la narrativa es fluida y sostenida.
¿Qué no nos ha gustado?
- Nada sorprendente: El amor es todo menos sencillo es una novela que no deslumbra por su originalidad. La trama es predecible y no tiene ningún giro que consiga realmente sorprender al lector y dejarle boquiabierto.
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